BODA REAL

Algunos de los valores humanos y sociales a los que acuden el príncipe de Asturias y su prometida, y también varios medios de comunicación, para justificar su compromiso son el amor, la familia, el matrimonio, las cualidades objetivas de la novia (trabajadora, inteligente, guapa, ...), etc. Todo esto, para asegurar que la novia del príncipe será una buena princesa y reina de España. Y es que todos estos valores demuestran miras altas por su parte y que tienen toda la intención de llevar a cabo el compromiso, porque están enamorados.

Pero cara a la opinión pública, tienen que tener en cuenta que el apelar al mundo de los ideales, como diciendo que estos valores permitirán que todo vaya bien, y el tener buenas cualidades, no vale. Porque el pueblo español sabe por experiencia, que todo esto hay que demostrarlo con los hechos.

Y es que, sin ir más lejos, a la reina actual le avaló como reina el haber sido educada para esto. Luego, además, a demostrado fortaleza y delicadeza para reinar.

Pretender ser reinar sin el conocimiento y aprobación de los hechos, es como querer el Nóbel de la paz contando lo que se va hacer sin llevarlo a cabo. Por eso pedir la mano de ella, por parte del príncipe, sin un periodo largo para mostrar sus dotes para ser la futura reina, es poco prudente.

Y es que la petición de mano por muy natural y por mucho que gustara a alguno, no asegura la permanencia de institución monárquica. Ni asegura que los españoles vayamos a tener una reina con la que estemos contentos.